150102 Valsain, Pesquerías Reales, Puente de la Cantina.
Puedes
dedicarte al festejo de bienvenida al nuevo año, puedes renegar de la navidad,
puedes ser chino (lo que implicaría que te dan igual estas fechas salvo que
tengas un bazar y te forres vendiendo gorritos de Papa Noel), o puedes salir a
caminar por el monte.
Si te dan a
elegir como actividad perjudicar el cuerpo, o intentar mantenerlo activo y
medianamente sano es una opción, que así... en frió... parece clara. Pero si la
misma propuesta la haces en estas fechas y realizas un sondeo de opinión entre
el colectivo de población ibérica (incluimos residentes de toda raza, condición
u origen), y sin tener en cuenta el grado de afección por el consumismo
navideño (también incluimos a todos independientemente del grado de perjuicio
físico-mental que asuma cada uno), el idiota soy yo por irme al campo a pasar frío
y además arrastrar a la familia con lo calentito que se esta en casa y pudiendo
ponerte como un autentico cebón con las sobras de la cena de nochevieja. ¡En
fin!. Asumiremos que esto del senderismo puede convertirse en pasión, que no en
vicio.
Valsain, a 75 Km de Madrid y 14 de
Segovia, es una pequeña población perteneciente al Real Sitio de San Ildefonso.
Nos dirigiremos a la zona mas baja para comenzar en la pradera de Navalhorno, en
la zona habitada surgida en torno al antiguo palacio de Valsain. Creció debido
a la creación del taller de Aserrio, como alojamiento de jornaleros e
industriales vascos dedicados a la compra venta de pinos. Creo que esta zona es
el Valsain original, pero también puede ser la parte de arriba mas cercana a
los bosque de explotación maderera. Admito aclaraciones.
Llegaremos por
la
carretera CL-601. Nosotros aparcamos en una zona residencial llamada
Barrio nuevo, entre Valsain maderero y Valsain ganadero, en la pradera, pero
podéis bajar hasta el pueblo de abajo, donde conseguiréis dejar el coche en
varias zonas sin molestar a los moradores de estas tierras.
En frente, al
fondo, las ruinas del antiguo palacio.
A nuestra
espalda, Valsain pueblo maderero en una gélida pero soleada mañana de Enero.
Justo frente a
las ruinas del palacio giramos a la izquierda para entrar en la pradera donde
comenzaremos nuestra ruta.
En la foto no
se parecía, pero al final del asfalto hay una cancela de acceso libre, que
deberéis cerrar (una vez la paséis, por supuesto) para que el ganado, muy
abundante, no escape y le de por hacer turismo urbano.
...Y ya
estamos pisando la pradera.
Por la mañana
llena de caballos y por la tarde vacas.
Si sois
reticentes a tener ganado cerca, girad hacia la izquierda, seguid pegados por
la orilla del rio y os librareis de la coexistencia animal. Nosotros por nuestra
parte, vamos a ir por el centro, aunque avanzando como un comando en Vietnam, con ojos hasta en el cul....,
hasta en la nuca.
Mi familia no
esta preparada para el contacto con la fauna nativa. ...Pero ahora que lo
pienso mas despacio..., casi voy a organizar las salidas familiares en áreas de
retoce pecuario, es la única forma en la que la familia esta junta y sin
discutir.... en voz alta, que nosotros, si es por discutir, discutimos hasta
por los posibles tonos del color negro.
Una de las
mejores cosas que tuvo este paseo, (y es que de un paseo se trata), es que Ita,
mi santa esposa, nos dejó meternos en los charcos sin protestar. Eso si, con la
cariñosa advertencia de ¡os vais a dar una leche...!!
Totalmente
llana (no empecéis con peros, que esta es facilona), es un recorrido de ida y
vuelta prácticamente lineal, aunque con alguna variante mínima que consistirá
en cruzar de orilla.
El resto de
datos, como siempre en el enlace que os incluyo al final y que os dirigirá al
track en Wikiloc.
Vamos llegando
al final de la pradera, que esta delimitada por una valla para evitar la fuga
del ganado, y nos acercamos al rio Eresma que es el que nos
acompañará en este deambular.
Nueva cancela
que debemos traspasar para poder caminar mas libres y a salvo de encontronazos
con equinos y bóvidos.
Nada mas salir al espacio libre, y habiendo
comprobado que hemos cerrado bien la puerta, nos topamos con el Puente
de los canales.
y que en origen fue erigido en época de Felipe II para abastecer de agua al derruido palacio de Valsain.
También atravesaremos zonas de ocio muy conocidas de la sierra madrileña, y si fuera veranito, podríamos hasta bañarnos.
Comprobareis
que no hay pérdida posible. Paralelos al rio, por este margen o por el de
enfrente, podremos disfrutar de igual
manera.
Lejos de la tranquilidad que aparenta nuestro periplo en esta helada mañana donde el agua se congela al tocar las ramas,
La vereda por
la que caminamos está preparada para el deambular peatonal desde épocas reales
para favorecer la pesca de truchas del rey Carlos III.
Os dejo una
serie de vistas que os mostrara que si podéis buscar un día de diario para
recorrerla, tendréis la recompensa de un entorno espectacular para disfrutar de
otro de esos parajes que desestimamos habitualmente por facilones y
deslustrados, por la fama de remanso dominguero que tanto nos fastidia a los senderistas pero que, una
vez aquí, demuestra que por algo es un sitio elegido por tanta gente.
Llegamos a estas escaleras que nos llevaran a una zona muy conocida de tortilla y sangría. Ahora diré cual y veréis como la conocéis enseguida.
Si os fijáis,
las rocas del rio están labradas para que el
monarca tuviera un fácil acceso y pudiera disfrutar cómodamente de su afición
favorita, la pesca.
Una escalera muy peligrosa. Todos tuvimos que agarrarnos fuertemente, y procurar pisar fuera de los peldaños, porque pisar en el hielo era una apuesta segura para acabar con la rabadilla como las tazas de porcelana de tu abuela que todas están descascarilladas (eso si, expuestas del otro lado para que no se vea el desportillado).
Una vez arriba, aparece el puente que da acceso a Boca del Asno. Zona recreativa del dominguerismo madrileño que cuenta con su propia aula de la naturaleza.
Al parecer el nombre le viene porque hay quien asegura que el remanso que forma aquí el rio Eresma se parece a la quijada abierta de un pollino.
Como podéis
observar, estamos sobre una piedra labrada en forma de plataforma para
favorecer la pesca.
No creo que
vengamos a disfrutar de los merenderos de esta zona, pero por si os interesa,
cuenta con un amplio aparcamiento, y para divertirse en grupos esta genial. De
hecho, con el grupo scout al que pertenecen los nanos, ya han venido en alguna
ocasión para hacer juegos en plan aventurilla.
No he marcado
el punto, porque el GPS que llevábamos hoy no me lo permite, pero hay varias
fuentes de agua potable cerca del sendero. Esta nos la descubrió un runner que
también quiso celebrar el año nuevo con salud.
La puerta
del... No se me ocurre nada original, pero dependiendo del contexto, esto lo pones en una película de serie “B”
tipo Conan con brujas de esas malas, malas, y da el pego. Encima de la piedra
pones un grifo (no de cerveza, no...) animal mitológico mitad águila, mitad
leon, y dices que es la entrada al limbo de los penitentes, y ya tienes
película para rellenar el sábado por la tarde.
A partir de
aquí os podéis dar la vuelta que ya habéis llegado,
Este es el
tramo mas duro de la ruta ya que es una pequeña cuesta, pero como estamos
acostumbrados al paseo que traemos, nos ha parecido un poco fastidiosa.
El puente de la cantina fue construido en tiempos de Carlos II para facilitar el acceso desde la corte a los palacios de La granja.
Por debajo, el
arroyo de las Lombrices...
En frente
podéis ver un aparcamiento, desde donde parten varias rutas y en el que esta la
fuente de La Canaleja o del Peñón.
http://www.acueducto2.com/puente-de-la-cantina-venta-de-los-mosquitos/19949 |
También, y detrás de la fuente, estaba la antigua venta de Los Mosquitos, donde paraban a descansar los extraordinarios carros con recuas de 8 mulas que transportaban grandes toneles de vino procedentes de Navalcarnero y Arganda con destino Segovia. En Internet he conseguido una foto donde todavía aparec.
Un nuevo panel informativo donde podremos saber mas sobre este histórico camino y las pesquerías reales.
Nos volvemos
por el mismo camino hasta llegar al puente de Navalacarreta
De nuevo en Boca del Asno
Las escaleras asesinas. A la
vuelta nos encontramos con un esguinzado por culpa del hielo aún presente.
Cruzamos Navalacarreta para volver por el otro margen y cambiar un poco la ruta
De vuelta en el puente
de los Canales.
Como os decía esta mañana,
los caballos han dado paso a las vacas que se cuentas por decenas..
Finalizamos recorrido justo para volver y tomar café en casa y disfrutar de las sobras de la nochevieja, en lo que a dulces se refiere, que ya le hemos dado al cuerpo su desengrase, y queráis o no, sigue siendo navidad por muy chino que seas.
Siempre os pongo un resumen de nuestra experiencia para que a parte de la distancia y el tiempo podáis evaluar el recorrido desde un punto de vista mas emocional, pero creo que hoy, como ya os comentaba anteriormente, no es el mejor exponente de la realidad del lugar. Un 3 de enero no es la mejor muestra del gentío que debe poblar este recorrido y por tanto el sentimiento que nos ha transmitido a nosotros, creo que solamente lo encontrareis un lunes si además a perdido el Madrid y estamos a últimos de mes.
Esta ruta lo tiene casi
todo. Real de realeza, con mucha historia, divertida y tranquila (hoy), con
agua fresca potable y con la opción de poder refrescarse. Zonas de ocio,
merenderos, y para los que os de reparo
la posibilidad de perderos, esta ruta es genial para iniciarse.
Si optáis por venir un 3 de
enero o un lunes aciago, podéis convertirla en romántica o en un lugar para
ideal para la confidencia y el secreto.
Como recomendación os
diremos que la anotéis en las futuras de “hay que venir si o si...” Veréis que
merece la pena.
Nos vemos en el
camino
Besos.